En algún momento de nuestra vida, pasamos de ser la REGLA a
la EXCEPCIÓN.
Cuando crecemos empezamos a cantar otra canción, y supongo
que en todas las etapas de nuestra vida, o simplemente, en aquel punto
minúsculo donde cambiamos, también lo hace la banda sonora que nos acompaña.
A mi parecer cada uno de nosotros cuenta con un repertorio
musical que le acompaña a lo largo de las semanas, y éste, va cambiando
conforme vives determinados acontecimientos.
Para que quede claro, no es lo mismo que suene: singing in
the rain un viernes por la noche después de una primera cita prometedora; que
suene It´s my life de Bon Jovi cuando discutes con tus padre sobre tu futuro.
Nuestra música vital también determina, a menudo, nuestro
estado anímico; y dependiendo de la que se escuche viviremos un día prometedor
o desastroso.
Para que lo entendamos, es diferente levantarse con Heavy
Metal, que con el sonido de los pájaros.
Ahora, y solo ahora, es cuando me pregunto: ¿A que suena mi
vida? ¿Cuál es mi acorde característico?... ¿A que huele el aire que
respiro?...
Tengo claras algunas cosas:
¿A que huele la fresa? A fresa.
¿A que huele el plátano? A plátano.
¿A que huele mi casa? A mi casa.
¿A que huele el coche? A coche.
Pero lo que no tengo tan claro es:
¿A que huele mi vida? A…
¿Podemos determinar el sabor, el olor, e incluso la canción
que marca el ritmo de nuestra vida? Ese sonido, esa banda sonora que guiará mis
pasos. ¿Y tu? ¿Si pudiéramos elegir solo una canción?.
No se que marcará mi vida o si yo misma, decidiré formar mi
propia mesa de mezclas para guiar mis pasos; lo que si que tengo claro, es que
cada paso, empieza con una primera nota.
"La música constituye una revelación más alta que ninguna filosofía" Beethoven.
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